Llamadme rara pero a mí vivir en un piso pequeño (y de alquiler) me gusta. Me gusta mucho. En invierno se calienta en un pis-pas, no tardo nada en limpiarlo y además es objeto de eufemismos adorables por parte de mis invitados, que demuestran en cada visita su excelente manejo del léxico del español. Mi casa es acogedora, recogida, asequible, cuqui, mona, bohemia… todos adjetivos reales otorgados por gente que me quiere.
Vivir en un espacio pequeño no significa además vivir apretado o agobiado. Sólo te obliga a aprender a no acumular objetos que no necesitas, a hacer limpiezas de vez en cuando y a mantener un cierto orden. Y ahí es cuando empiezan mis problemas, porque ésto último me ha resultado siempre muy difícil. De mis muchos defectos el desorden ocupa el segundo puesto, sólo superado por mi legendaria torpeza.
Sin embargo, con el paso del tiempo he llegado a aparentar ser una persona ordenada (ya sabéis… fake it till you make it) con los siguientes truquillos para mantener el orden en un espacio pequeño:
1. CREA UNA ENTRADA
Si eres de los que deja el abrigo encima del sofá, las llaves en la mesilla de noche y las zapatillas en el baño, entonces eres de mi equipo. Pero traigo buenas noticias: una entrada es el sitio perfecto para evitar que todas esas cosas se desparramen por tu casa. Y sí, puedes crear una entrada en un espacio pequeño. Con un colgador, una balda y un par de cestas ya tendrás sitio para dejar llaves, dinero suelto, móvil, abrigo, bolso, mochila y zapatos en el primer metro cuadrado de tu casa.
2. UN SITIO PARA CADA COSA
Ya me lo decía mi abuela y cuánta razón tenía: «Cada cosa en su sitio y un sitio para cada cosa». En una casa grande, esta máxima ya tiene lógica, pero en un espacio pequeño en el que te puedes hacer unos huevos fritos mientras estás viendo tu serie favorita en el sofá la frase es aún más valiosa.
3. REDUCE TU HABITACIÓN AL MÍNIMO
¿Cuántas veces tenemos tantas ganas de irnos a dormir que nos quitamos la ropa y la dejamos encima de una silla o de cualquier otro bulto que tengamos en nuestros aposentos? Evitémoslo eliminando toda superficie que no sea totalmente necesaria de nuestro cuarto. Así matamos dos pájaros de un tiro: evitamos la acumulación de ropa y ganamos un espacio valiosísimo en el reducido espacio de nuestra habitación.
4. GUARDA JERÁRQUICAMENTE
Para mantener el orden en una casa pequeña es muy útil tener a la vista sólo aquellos objetos que utilizamos a diario. Por ejemplo, si hacemos tostadas sólo los fines de semana podemos ganar orden visual y espacio de trabajo guardando la tostadora en un cajón. Sin embargo, si cada mañana bebemos un zumo de naranja tiene toda la lógica del mundo que el exprimidor esté en la encimera.
P.D. Y tú, tanto si eres una persona ordenada o un desastre, ¿cómo mantienes el orden en un espacio pequeño?
*Foto de portada: Unsplash